En una producci贸n de escaso vuelo, el Pincha volvi贸 a sumar de a 3. As铆 repiti贸 el golpe de la fecha anterior, pegando primero y obligando a su antagonista velezano. Jug贸 mal y gan贸 el puntero, una s铆ntesis que se viene haciendo reiterativa, en especial, por el bajo de nivel de la dupla Bra帽a-Ver贸n, ambos muy por debajo de su mejor versi贸n, sobremanera el capit谩n. El motor y el coraz贸n del equipo no pesan, y en consecuencia, m谩s all谩 de la solidez defensiva, del gran momento de Enzo P茅rez, o del oportunismo de la Gata, los rivales le pierden el respeto al l铆der del torneo. Que siente los partidos, y hace rato dej贸 de disfrutarlos.
Fue el caso de un Independiente alternativo, fresquito para encarar el match sin presiones, aunque los 13 puntos sumados en el campeonato no son disimulados por su inesperada llegada a una Final sudamericana. Pero ojo, Pellerano, Graci谩n, el pibe Jorge P茅rez o el Patito Rodr铆guez (su ingreso enloqueci贸 a Fede Fern谩ndez) saben con los pies, y ser铆an titulares en la mayor铆a de los clubes de Primera A.
En ese contexto, comienzo dubitativo de Estudiantes… y un gol de chiripa, cuando la cortada de Enzo para la Gata es cerrada por Matheu en una involuntario asistencia a Pereyra, descolocando a su arquero; el tucumano se encuentra con el regalo y la empuja al arco vac铆o. En los 10’ siguientes lo pudo aumentar el Grande, sin embargo empez贸 a replegarse, entreg贸 la pelota, y hasta la culminaci贸n de la etapa fue casi todo del local, que incluso revent贸 el travesa帽o de Ori贸n con un zapatazo de larga distancia. Sabella cambi贸 de bandas a Enzo y a Pereyra, aunque no dio resultado y enseguida volvi贸 a la alineaci贸n inicial.
En ese contexto, comienzo dubitativo de Estudiantes… y un gol de chiripa, cuando la cortada de Enzo para la Gata es cerrada por Matheu en una involuntario asistencia a Pereyra, descolocando a su arquero; el tucumano se encuentra con el regalo y la empuja al arco vac铆o. En los 10’ siguientes lo pudo aumentar el Grande, sin embargo empez贸 a replegarse, entreg贸 la pelota, y hasta la culminaci贸n de la etapa fue casi todo del local, que incluso revent贸 el travesa帽o de Ori贸n con un zapatazo de larga distancia. Sabella cambi贸 de bandas a Enzo y a Pereyra, aunque no dio resultado y enseguida volvi贸 a la alineaci贸n inicial.
Si era inmerecido el 0-1 por el tr谩mite observado, el Rojo puso justicia en el arranque de la segunda parte. Durmi贸 la zaga, vino el centro del Patito Rodr铆guez y Nicol谩s Mart铆nez la revent贸 entre la red y el horizontal. “Vamos vamos los pibes”, gritaban los de CAI, ante un visitante aturdido.
En ese instante de preocupaci贸n, de zozobra, el Chino Ben铆tez –reemplaz贸 a Pereyra- result贸 fundamental para ponerla contra el piso. Y el once de Sabella, supliendo falta de piernas con oficio, frialdad, sacrificio y paciencia, cape贸 la tempestad y de a poco arrincon贸 a Independiente, logrando el dominio territorial y recobrando cierta tenencia. Lo tuvo Marquitos, adelantando el bal贸n en la puntada final. Le anularon uno a la Gata. El Rojo toqueteaba pero no lastimaba, y Estudiantes la recuperaba mucho m谩s r谩pido; empero, la salida del mediocampo muchas veces era Mercado, y el ex Racing ensuciaba el traslado. JSV lateralizaba demasiado o la pasaba para atr谩s, quiz谩s a sabiendas de su mala tardecita. Enzo daba muestras de cansancio. Y Bra帽a no clarificaba, en un esquema que ya lo ten铆a como doble cinco a la par del Chino, con Sebasti谩n ubicado m谩s adelante.
En ese instante de preocupaci贸n, de zozobra, el Chino Ben铆tez –reemplaz贸 a Pereyra- result贸 fundamental para ponerla contra el piso. Y el once de Sabella, supliendo falta de piernas con oficio, frialdad, sacrificio y paciencia, cape贸 la tempestad y de a poco arrincon贸 a Independiente, logrando el dominio territorial y recobrando cierta tenencia. Lo tuvo Marquitos, adelantando el bal贸n en la puntada final. Le anularon uno a la Gata. El Rojo toqueteaba pero no lastimaba, y Estudiantes la recuperaba mucho m谩s r谩pido; empero, la salida del mediocampo muchas veces era Mercado, y el ex Racing ensuciaba el traslado. JSV lateralizaba demasiado o la pasaba para atr谩s, quiz谩s a sabiendas de su mala tardecita. Enzo daba muestras de cansancio. Y Bra帽a no clarificaba, en un esquema que ya lo ten铆a como doble cinco a la par del Chino, con Sebasti谩n ubicado m谩s adelante.
Sabella meti贸 a Roro por Mercado –lo insultaron en todos los idiomas-, y Hern谩n entr贸 bien, tocando de primera y buscando espacios libres. Por ah铆 lo mira a Bra帽a de frente, pica al vac铆o, el Chapu se la tira por arriba en uno de sus contados aciertos, Roro se contornea al filo de la l铆nea de fondo y mete el centro atr谩s que la Gata define con un gesto de potrero, dejando el cuerpo muerto para amortiguar una pelota que lo sobraba, rebot谩ndola en su cabeza hacia una par谩bola perfecta. El f煤tbol se eleva al cielo, como para irse muy alto, de repente toma el contraefecto y baja mansito por encima de un Gabbarini agarrado a contrapierna, besando su 谩ngulo izquierdo y desatando la locura en la colmada tribuna pincharrata. Golazo.
Despu茅s, la expulsi贸n de Enzo P茅rez en jugada irrelevante, una m谩s en su trayectoria; a su favor, la justa amarilla tempranera se la marcan de caliente, porque corre 30 metros para bajar a un adversario que en la acci贸n previa le hac铆a un foul no cobrado por Laverni. Despu茅s, la carga barraca del Diablo, con su arquerito yendo a cabecear en el 煤ltimo corner. Despu茅s, la caravana rojiblanca inundando la autopista, con la esperanza latente de otra estrella.
Quedan Argentinos, River y Arsenal. Tres cotejos chiv铆simos, ya que no existen los oponentes sencillos, al margen de cuestiones extrafutbol铆sticas como incentivaciones, designaciones sugestivas de 谩rbitros, horarios absurdos, o cualquier faceta caracter铆stica de un deporte corrompido de ra铆z por obra y gracia del Don King argentino, ese personaje inamovible, vetusto y enfermo de poder.
Estudiantes va, contra viento y marea. Su fe ilusiona. Con las reservas f铆sicas al l铆mite, hierve la piel del Le贸n por su sangre caliente, sedienta de gloria.
Salutti
Gracias Marble